Hija de padres separados, la quinta de 5 hermanos! Muchas cosas vividas y mochilas que no eran mías sino de mis padres…Muchos amores fallidos!
Entendí que muchas veces una se estanca en la vida por no soltar! Para soltar hay que dejar de sufrir y para dejar de sufrir hay que perdonar! A veces a alguien, a veces a nosotros mismos!
Todo se fue dando como obra de magia. Terminé mis estudios de auxiliar de farmacia y empecé a trabajar en una clínica. Conocí a Fernando, me enamoré, quedé embarazada… Todo rápido!
Él me dejó a los pocos meses. Fue terrible llevar el embarazo sola. Me dormí cada noche llorando por no ser amada… Con mí hijo en la panza!
Lorenzo nació en abril de 2018. Tan amado, tan esperado, tan mío! Aún recuerdo la primera vez que vi sus ojitos y supe que nada iba a ser igual!Era lo más hermoso que había visto en mí vida ! El padre siempre estuvo presente , venía los fines a verlos y se hizo cargo.
Pero estábamos solos con Loren, yo trabaja todo el día y solo estaba con él un par de horas al día. Lo cuidaba mí mama y una niñera. Y los fines de semana también trabajaba así que él estaba con su papá. Me pasaba todo el día trabajando y fue muy duro para los dos.
Cuando cumplió un año tenía infecciones urinarias recurrentes. Le descubrieron una malformación congénita. Fue una pesadilla salir de trabajar, buscar a mí hijo y llevarlo al médico. Inyecciones constantemente, cultivos cada 2 semanas, tratamiento de profilaxis. Él con un año y yo trabajando todo el día.
Al año y medio deciden operarlo. A la media hora de entrar al quirófano nos avisan que había tenido una complicación con la anestesia. Cuando me dijeron las medicaciones que le dieron supe que mi hijo se había muerto… y lo habían revivido.  Pasé las peores 3 horas de mi vida hasta que despertó. En la convalescencia lo cuidamos con el padre, mientras el pobre Lorenzo estaba lleno de cables. Ahí nunca llore, sino recién un par de días después, sola en casa… Lloré tanto que me dolían los ojos!
El medico de terapia me pidió que no alzara a mí hijo, que solo podía tocar su mano! Yo sabía que de ahí solo íbamos a salir juntos! No le hice caso y alcé a mí hijo en mis brazos, dormido, conectado a esos cables. Lo puse en su tetita, y le hablé y le canté. Se despertó y se prendió!  Descubrí que el amor es más fuerte y así salimos de terapia, de la mano. Ser valiente no es quien es más fuerte, sino quien más ama la vida!
A fines de 2019 renuncié a mí trabajo para estar con él. No me importó dejarlo todo, entendí que lo importante era él y nunca más iba a dejarlo solito! Nunca más volvieron sus infecciones urinarias. Quizás era su forma de manifestar que necesitaba su mamá.
En el 2020 vino la pandemia y tuvimos covid. Después, como tardaba en caminar y en hablar, le diagnosticaron autismo. Otro golpe que nos daba la vida ! Pero lo estamos aprendiendo a llevar.
En marzo de este año se golpea la cabeza y al controlarlo le diagnostican epilepsia benigna infantil. Otra semana internados, pero salimos adelante. Una vez más de la manito juntos!
En abril cumplió 3 añitos! No sabes lo hermoso que es! No es porque sea mí hijo pero es tan inocente, tan lindo, tan bueno!
Y mí pregunta es por qué? No tengo nada, ni marido, ni trabajo, ni plata.
Pero sabes qué? Soy la persona más feliz del mundo!
Cuando salí de esa terapia entendí TODO! Tengo a mí hijo vivo y conmigo! Y estoy tan agradecida a la vida por tenerlo! Por despertar y ver esos ojitos tan lindos, por su sonrisa, por su existencia.
Tengo una casa que es mía, puedo vivir dignamente aún habiendo dejado mí trabajo y mí profesión que amo. No tengo pareja pero sí una familia que me apoya. Mí hijo tiene su familia y una madre y un padre que lo aman! Tengo un perro, un gato, un jardín y todo lo que necesito para ser feliz!
La felicidad no se trata de tenerlo todo, sino de ser feliz con lo que tenemos ! No conformarse pero si valorar lo esencial que es el amor y los afectos, la salud y la paz.
Ya no vivo cansada como cuando dejaba a mí hijo solo todo el día ! No todas las mamás tenemos la suerte de poder dejar el trabajo, yo la tuve y estoy muy agradecida!
Si me haría más feliz una pareja? Quizas… No porque tenga el deber de darme algo aún afecto sino porque yo elija compartir mií vida con esa persona. Sin espectativas de que me deba algo o sienta  el derecho de exigir algo. Solo elegirnos como compañeros.
Tengo mí hijo vivo, pero no es mío.  Es libre y mi obligación es mostrarle el camino de la vida sin apropiarme.
Todos los días me despierto pensando qué pasaría si le pasa algo o si me pasa algo.
Entonces elijo agradecer y soltar. Estoy viva y mí hijo está vivo. El sol me da en la cara y aprendí a apreciar lo simple.
Cintia
La sabiduría no es una estación a la que se llega, sino una manera de viajar.

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